Con el respaldo macroeconómico que timonea el Banco Central en momentos en que la tasa del dólar ha bajado en su cotización frente al peso, el presidente Abinader se siente envalentonado, planta cara a sus opositores, y dice “no más” a la presiones y quejas procedentes de Haití.
Los acontecimientos de los últimos días se producen cuando el gobernante capitaliza al máximo el desplome de la discoteca Jet Set que dejó un saldo superior a los 230 muertos y numerosos heridos. Desde el primer momento se le vio cariacontecido al frente del duelo nacional.
Abinader, quien asiste con su esposa a las exequias del Papa Francisco en el Vaticano, escuchó esta semana al gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu reafirmar “la fortaleza y resiliencia del sistema financiero dominicano en un entorno internacional complejo, convulso e incierto”.

El presidente defendió en una reciente Semanal, las ejecutorias del gobernador Valdez Albizu en momentos en que algunos opositores manifestaban exceptisismo y alegaban que la tasa del dólar podría llegar a 70 pesos por uno. Ha sido lo contrario, porque ha ido en baja.
Cáustico como a veces cuando se refiere a sus críticos, el gobernante recordó que el licenciado Valdez Albizu fue el mismo gobernador de los anteriores presidente Leonel Fernández en sus tres gobiernos y Danilo Medina, en sus dos, pero no mencionó por sus nombres a los políticos.

Valdez se encuentra actualmente como jefe de delegación en las reuniones del Fondo Monetario Internacional, FMI y del Banco Mundial que se realizan en la ciudad de Washington, D.C. Recibió el encomio de Rodrigo Valdez, director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI por el buen desempeño de la economía dominicana. Valdez Albizu es el decano de los gobernadores.
Recientemente, el gobernador Valdez Albizu se dirigió a los inversionistas dando seguridades de que es acertado invertir en la República Dominicana, pese a la incertidumbre internacional. El gobernador planteó ante dirigentes del Consejo Nacional de la Empresa Privada que el sistema financiero es fuerte y que la macroeconomía se mantiene estable en un clima de paz y seguridad.
El presidente Abinader retornará ligerito desde el Vaticano, para recibir en audiencia al canciller de Rusia, Serge Lavrov, quien se supone trae en su portafolio cosas serias entre los dos estados, quizás hasta el interés del Kremlin por las tierras raras.

Parar en seco a Haití
El presidente Abinader anunció el pasado domingo una serie de medidas que buscan “parar en seco” la entrada ilegal de haitianos por la frontera dominicana, un dolor de cabeza que ha sido la preocupación de su régimen. Quizás con el temor de que el tema derive en político como ocurrió en el pasado, el presidente dispuso medidas drásticas.
Una de ellas, para sorpresa del público, fue la destrucción del guetto haitiano de Mata Mosquito, en Friusa, Bávaro, donde zapadores del Ejército Nacional destruyeron casas y pequeños locales comerciales en los que vivían centenares de haitianos. Se decía que allí no mandaba el estado dominicano.
Paralelamente a eso, autoridades de Migración recorrieron los hospitales de maternidad del país para supervisar la aplicación de un nuevo protocolo que esencialmente busca que las haitianas que se presenten a dar a luz paguen por el servicio y retornen a Haití tras el alta.

Esa medida provocó el enojo del gobierno de Haití y también de organizaciones internacionales como Amnistía Internacional, los cuales reclamaron respeto a los derechos humanos. Inconformes con las drásticas medidas adoptadas por el régimen de Abinader, la llamada Antigua Orden Dominicana ha pedido más, dejando ver el trasfondo político del tema.
Quizás el presidente Abinader no quiere que el tema haitiano sea llevado a la política, como ocurrió durante el gobierno del profesor Bosch en 1963, cuando un roce con el régimen de Duvalier provocó tensiones entre los dos países y se convirtió en excusa para el golpe de estado.
Lic ;Guarionex Rosa
Le dejo un caluroso abraso de Parte de su Fiel Leiente ..Que Dios Le Bendiga Crandemente ..Y a sus Familiares